"LOS DEVOTOS DE SIMI VALLEY": Eusebi Val escribe sobre la biblioteca presidencial de Ronald Reagan; por lo visto, le hace gracia que un lugar dedicado a homenajear a un ex-presidente (como ocurre en todos los casos en EEUU, donde cada presidente tiene su biblioteca-museo), pagado exclusivamente con dinero procedente de donaciones privadas -es decir de simpatizantes- se centre en hablar bien de él:
La admiración y la ausencia de crítica dominan la narrativa del museo. Reagan es presentado como el hombre que doblegó al comunismo; sin matices. El escándalo Iráncontras apenas se menciona. El apoyo a los muyahidines afganos aparece como un éxito, sin explicar que fue la semilla de Al Qaeda y los talibanes. El despido de 11.500 controladores aéreos se justifica como inevitable, casi heroico. Ni una línea sobre las guerras sucias en Centroamérica.Tengo una idea: que vaya a Little Rock, a la flamante bibliteca presidencial de Bill Clinton, a ver si encuentra alguna referencia a Vince Foster, Whitewater, o que presente el affaire Monica Lewinsky (ahí no hace falta que ponga enlace, ¿a que no, pillines?) de un modo que no sea narrando su lucha épica contra los malos.
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