CUANDO AYER estaba cubriendo en Pajamas Media la masacre de la Universidad de Virginia ya veía cómo iba a ser la información de los medios españoles. Los que he leido o visto aprovechan para afirmar que es una consecuencia de la libertad de armas en EEUU, cuando por alguna "extraña razón" este tipo de incidentes suelen ocurrir en escuelas y universidades y en las generalmente establecidas como "zonas sin armas" (VA Tech, donde ocurrió lo de ayer, votó en ese sentido el pasado verano).
Además, los medios españoles encadenan sin pudor, a lo Michael Morre -perdón, Moore-, los episodios de violencia que han tenido lugar en el pasado en EEUU, con lugar destacado para Columbine, cómo no. Al fin y al cabo en Europa, donde las armas no están permitidas, jamás ocurren cosas así. Que se lo pregunten a los alumnos del colegio de Erfurt, Alemania, donde un estudiante que temía ser expulsado asesinó a 16 personas a sangre fría en 2002. O a los de Dunblane, en el Reino Unido, donde murieron 16 más.
Además, los medios españoles encadenan sin pudor, a lo Michael Morre -perdón, Moore-, los episodios de violencia que han tenido lugar en el pasado en EEUU, con lugar destacado para Columbine, cómo no. Al fin y al cabo en Europa, donde las armas no están permitidas, jamás ocurren cosas así. Que se lo pregunten a los alumnos del colegio de Erfurt, Alemania, donde un estudiante que temía ser expulsado asesinó a 16 personas a sangre fría en 2002. O a los de Dunblane, en el Reino Unido, donde murieron 16 más.
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