martes, diciembre 09, 2008

SEPTIMIUS SEVERUS fue el primer emperador romano no-blanco: padre africano, madre blanca. Tuvo que lidiar con una campaña bélica en Iraq y con una economía hecha pedazos, viéndose obligado a subir los impuestos para pagar el déficit. Existió de verdad, y los paralelismos con Obama no acaban ahí. Curiosas las vueltas que da la historia.