lunes, febrero 02, 2009

CONSEJOS VENDE, pero él no se suspende (req. suscr.):
Barack Obama desea contentar a los ecologistas y ser un presidente verde, pero no hasta el extremo  de pasar frío en el despacho Oval. Por eso, aunque pudiera irritar a los defensores estrictos del medio ambiente, decidió subir el nivel del termostato de la calefacción en sus primeros días como presidente, que coincidieron con una ola de frío en Washington. "El es de Hawái, ¿vale?", justificó a The New York Times David Axelrod, estrecho asesor del presidente, el aumento de temperatura decidido por el jefe, obviando que ha vivido más de veinte años en Chicago, una ciudad de inviernos muy rigurosos.
No sólo ha obviado esto. Este Obama es la misma persona que en el pasado mes de mayo, daba lecciones a la gente:
"We can't drive our SUVs and eat as much as we want and keep our homes on 72 degrees at all times ... and then just expect that other countries are going to say OK," Obama said.

"That's not leadership. That's not going to happen," he added.
Menudo leadership.