HAY QUE RECONOCER que hábil, lo que se dice hábil, Zapatero lo es un rato: hoy podemos leer en la prensa que "Zapatero planea relevar a Bermejo en su primera remodelación del Gobierno" (El País), y "Bermejo pierde el favor de Zapatero" (La Vanguardia), aludiendo ambos a innominadas fuentes de La Moncloa.

Raudos a acudir en ayuda de quien tiene que salvarles el cuello, no sea que cambie de idea, y tras sus meriendas discretas, la prensa -siempre tan servicial, ella- cumple su parte del trato para que, por un lado, Zapatero siga teniendo a Bermejo como pimpampum (y va con segundas) evitando tener que mirar a los ojos a los españoles con la crisis hasta el cuello. Y por otro lado, da a entender que él está "en el lado correcto:" que está tan enfadado con él como la mayoría de ciudadanos. Que todo cambie para que no cambie nada, como en El Gatopardo.