[Actualizado 2 veces] SI SÓLO LEÉIS UNA COSA HOY sobre el sainete hondureño probablemente tiene que ser esto, escrito por un antiguo guerrillero salvadoreño. Un sainete en el que todas las partes dan vergüenza ajena. Incluidos muy especialmente los que con razón critican ahora lo ocurrido el pasado domingo, pero que sin razón alguna estaban callados como p*tas mientras Zelaya estaba dando un golpe de estado sin fusiles, porque eso era lo que estaba intentando.
ACTUALIZACIÓN. Y si queréis leer una segunda cosa sobre Honduras, no estaría mal que fuese lo que escribe Daniel Rodríguez Herrera.
ACTUALIZACIÓN II. Me encanta lo de Cacapundit, en serio. Y por cierto, si se tiene algún problema en darse cuenta de que es posible dar un golpe de estado sin fusiles quizás conviene salir, ni que sea por un día, del mundo de los dibujos animados. Sólo en él estas cosas únicamente las pueden hacer señores vestidos de militares que le apuntan a uno con un pistolón (como lo hizo Castro, o Lenin, dicho sea de paso. ¿Dieron ellos un golpe de estado, Antonio? ¿Vas a criticarlo y decir que no tienen legitimidad, para ser tan coherente como se lo exiges a los demás?).
Claro que es peor ser incapaz de distinguir entre querer presentarse a un tercer mandato (y perseguir la vía legal para conseguirlo, a ver si se gana), como hizo Uribe --y como muchos llegaron a proponer para Clinton-- o hacerlo poniendo cabeza abajo el orden constitucional en contra de todo el mundo, como ha hecho Zeleya, haciendo caso omiso de todo y a todos.
Y perdone usted mis modales, doña Virtudes. Parece usted mi tía bisabuela en la época de Alfonso Doce.
ACTUALIZACIÓN. Y si queréis leer una segunda cosa sobre Honduras, no estaría mal que fuese lo que escribe Daniel Rodríguez Herrera.
ACTUALIZACIÓN II. Me encanta lo de Cacapundit, en serio. Y por cierto, si se tiene algún problema en darse cuenta de que es posible dar un golpe de estado sin fusiles quizás conviene salir, ni que sea por un día, del mundo de los dibujos animados. Sólo en él estas cosas únicamente las pueden hacer señores vestidos de militares que le apuntan a uno con un pistolón (como lo hizo Castro, o Lenin, dicho sea de paso. ¿Dieron ellos un golpe de estado, Antonio? ¿Vas a criticarlo y decir que no tienen legitimidad, para ser tan coherente como se lo exiges a los demás?).
Claro que es peor ser incapaz de distinguir entre querer presentarse a un tercer mandato (y perseguir la vía legal para conseguirlo, a ver si se gana), como hizo Uribe --y como muchos llegaron a proponer para Clinton-- o hacerlo poniendo cabeza abajo el orden constitucional en contra de todo el mundo, como ha hecho Zeleya, haciendo caso omiso de todo y a todos.
Y perdone usted mis modales, doña Virtudes. Parece usted mi tía bisabuela en la época de Alfonso Doce.
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