SEGÚN LA TV estatal pakistaní, el líder taliban en el país, Hakimullah Mehsud, ha muerto por un misil estadounidense; el diario local The Nation afirma que el ataque se produjo el 14 de enero, y que murió tres días más tarde.

Poca gente lo lamentará. Eso sí, si en lugar de reventarlo a misilazos lo hubiesen llevado a Guantánamo y lo hubiesen obligado a estar de pie unas cuantas horas, o a escuchar música de Metallica a todo trapo, estaríamos oyendo cómo la gente acusa a EEUU de torturas...