viernes, abril 09, 2010

LA SEGURIDAD SOCIAL para los autónomos, extorsión de Estado: hasta Mercè Molist, conocida periodista tecnológica a quien nadie puede acusar precisamente de ser una ultraliberal-neocón-sin-escrúpulos, hace números y se da cuenta:
En una época de mi vida salí con una panda de punkies. Hasta que les dejé porque me dí cuenta de que siempre me tocaba pagarles cosas y ellos jamás pagaban nada. Era su pardilla oficial, vaya. Hoy me siento igualmente la pardilla, pero ahora no puedo simplemente pasar de esa gente [el régimen de autónomos de la Seguridad Social], porque dicen las leyes que no se me permite trabajar si no estoy dada de alta en los autónomos.

Esto es una estafa en toda regla y no la SGAE o Gürtel. Me saldría más barato pagar una buena mutua y hacerme un plan de pensiones. Me servirían para lo mismo que me ofrecen los autónomos. Pero no, me obligan a acatar esa extorsión del estado. Estafa, extorsión, no hay otra forma de describirlo.
Bravo, Mercè; leedlo entero. Lo mismo puede decirse del régimen general, por cierto. Dentro de lo malo, la reforma sanitaria de Obama al menos no crea un sistema público (tendente a la elefantiasis, a la ineficiencia y al despilfarro), sino que obliga a contratar un seguro privado en un régimen de competencia que, con todas las distorsiones que queráis, sigue siendo mejor que la alternativa estatalista.