jueves, noviembre 28, 2013

JORDI PÉREZ COLOMÉ: “¿Por qué Kennedy nos gusta tanto? A los 50 años del asesinato del presidente de los EEUU, todavía hoy la prensa en España sigue recordándolo. ¿Por qué? Kennedy fue un presidente mediocre y le debe parte del mito póstumo a su sucesor, Lyndon B. Johnson.” Y accedió a la presidencia en una ajustadísima victoria gracias al voto de varios miles de muertos en Chicago, cosa que ya entonces Nixon supo perfectamente pero aún así decidió conceder la victoria a su oponente para no abrir una crisis constitucional.

Volviendo a la adoración por Kennedy el motivo es muy sencillo: el mismo por la que Marilyn Monroe o James Dean también son mitos. Todos murieron en su momento de esplendor, y además de forma misteriosamente trágica. En el caso de Kennedy, antes de que 'hiciera un Obama' y hubiese ocasión de demostrar que había poco de real detrás de la imagen. Y en el de Marilyn o James Dean… muy distinto sería si la viéramos ahora, con ochentaylargos, y habiendo asistido a su envejecimiento año a año. En cambio, los tres se han quedado 'congelados' en la memoria colectiva en el momento en que estaban más 'frescos', como las merluzas de Pescanova — aunque reconozco que no sea quizás la mejor comparación...