AFIRMA LA VANGUARDIA en un editorial:

La otra gran paradoja de la situación iraquí es que la intervención armada extranjera ha unido a enemigos antaño irreconciliables, los simpatizantes de Al Qaeda y del Partido Baas de Saddam Hussein.

Si en el rotativo barcelonés hicieran algo más que mirarse el ombligo, sabrían que eso no es cierto.

ATUALIZACIÓN. Claro que lo de su corresponsal en Oriente Medio, el inefable Tomás Alcoverro, es peor; hoy vuelve a hacer prácticamente una oda a Hamas:

La popularidad de Hamas -que en la percepción puramente israelí y occidental es sólo la organización radical manipuladora del martirio de los terroristas- está sobre todo basada en su amplia acción social. Su carta fundamental, que aún establece la destrucción de Israel y que evidentemente deberá modificar si alguna vez llega al gobierno, se refiere a que hay que "fortalecer la sociedad", insuflarle "los valores islámicos para emprender la lucha". "La construcción de una sociedad islámica es necesaria -reza el texto- para llevar a cabo el combate por la liberación". A través de las instituciones caritativas, de las mezquitas, las escuelas, los dispensarios y los orfanatos despliega su política de ayuda a los sectores más pobres de la población.

No hace falta que sigáis leyendo; es todo así. Mientras tanto, en el mundo real: "Mahmud Al-Zahar: «No reconoceremos a Israel bajo ninguna condición»"