jueves, febrero 16, 2006

SINCERAMENTE, sólo tengo un comentario que hacer a la publicación en todos los medios de las nuevas imágenes del mismo viejo episodio de torturas en Abu Ghraib, rechazable pero ya conocido, y castigado.

Y es que, después de que los medios hayan estado ocultando durante semanas las imágenes de las caricaturas de Mahoma, de rabiosa actualidad y además imprescindibles para entender la polémica, para "no despertar o contribuir a la ira de la calle árabe", ahora vemos cómo esas imágenes de tortura se publican en todos los medios a pesar de que van a excitar los ánimos de esa calle árabe.

Muchos ven una contradicción. Yo no. La explicación es sencillísima: a diferencia del asunto de las viñetas, ahora con las imágenes de Abu Ghraib la ira de la calle árabe no estará dirigida contra los medios. Los responsables de publicar estas últimas no van a tener que llevar guardaespaldas, o vivir escondidos por miedo a que alguien los decapite por haberse atrevido a publicarlas.