UN POCO DE información sobre Ron Paul. Hace tiempo que tenemos el material, y The New Republic sale hoy con algo en la misma línea. Y me sabe mal decirlo, pero lo que aparece en los enlaces debería descalificar a cualquiera: ya no tanto por el supuesto antisemitismo -que estoy de acuerdo en que podría verse como exagerado- sino por su racismo anti-negro (llega a acusar a Martin Luther King de... ¡pederasta!), su homofobia, sus paranoias, sus elogios a David Duke, el tipo del Ku Klux Klan que estuvo en España hace poco... En fin, leedlo vosotros mismos.

La excusa de su campaña, de que él no escribía todo y que no controla lo que aparece en la newsletter que lleva su nombre, sencillamente no es de recibo. En primer lugar porque hay que ver qué hay de cierto en eso. Pero aunque fuera verdad, estamos hablando de documentos que fueron publicados durante años (son cientos de páginas que tengo delante de mí en estos momentos), y él trata de acceder a la Casa Blanca. ¿Como puede aspirar a dirigir el país más poderoso del mundo -aunque sus posibilidades de ganar fueran nulas, lo cierto es que lo intenta- si no puede controlar un puñado de colaboradores?

ACTUALIZACIÓN (Miércoles 9). Sigo aquí.