viernes, junio 13, 2008

IRLANDA ha votado no al tratado de Lisboa, poniendo fin al último intento de cacicada de los protagonistas del sueño europeo: visto lo que había pasado en Francia y Holanda con el intento anterior, aprobar la pseudo-constitución europea sin que -excepto en el verde país- se sometiera el veredicto popular. Casi lo consiguen, pero no.