viernes, agosto 21, 2009

SÉ QUE ESTÁ HECHO CON LAS MEJORES INTENCIONES, pero no puedo evitar que esto me dé un poco de yuyu: los supervivientes del accidente aéreo de los Andes en 1972 -los que tuvieron que recurrir al canibalismo para sobrevivir- son los protagonistas de una campaña del gobierno urugayo para fomentar la... donación de órganos.

¿Un golpe genial de relaciones públicas? ¿Una campaña de mal gusto? El tiempo lo dirá. Pero se presta a tantas bromas macabras ("¿Qué pasa, que les ha entrado el gusanillo?")...