miércoles, junio 02, 2010

SÍ O SÍ:
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado que aprobará dentro de dos semanas, el próximo miércoles 16 de junio, la reforma laboral en Consejo de Ministros "se produzca acuerdo o no" en la mesa del diálogo social. La elección de esta fecha no es gratuita ya que permitirá al Ejecutivo acudir al Consejo Europeo que se celebra al día siguiente en Bruselas, el que cierra la presidencia de turno europea de España, con el proyecto bajo el brazo.

Según ha defendido Zapatero, la reforma "es necesaria para ayudar a crear empleo y que haya una contratación estable", pero también para dar "señales de calma y confianza desde España" a los mercados. Además, ha adelantado que ya tiene perfilado el contenido del decreto y que los cambios afectarán "a aspectos esenciales del mercado laboral". En el caso de que finalmente sí haya acuerdo entre los agentes sociales, algo que "no es nada fácil" de lograr, según ha reconocido el propio presidente, el Gobierno incorporará su contenido al proyecto.
Lo que pasa es que si sólo se crea un nuevo contrato indefinido con una menor indemnización por despido no se solucionará nada: en vez de dualidad, tendremos "trialidad" en el mercado de trabajo: temporales, fijos con contrato antiguo, y fijos con contrato nuevo. Si lo que se hace además es eliminar los contratos temporales, entonces será dual, pero peor que antes.

Es duro y sé que el gobierno no lo hará, pero lo único que conseguiría resultados es abaratar el despido de todos los fijos, incluidos los actuales con "contrato antiguo". Además de fomentar la contratación, lograría aumentar la productividad y disminuir el absentismo, que son los grandes problemas que hay. Muchos fijos actuales pueden dedicar horas de su trabajo a hacer la compra del super por internet, o a no ir al trabajo porque tienen resaca, seguros de que es complicado despedirlos. Con un despido más barato, no tardarían nada en ponerse las pilas.