miércoles, junio 23, 2010

YA SABÉIS que no ahorro críticas al modo en que el PP está ejerciendo la oposición, pero esta retórica está pasando ya de castaño oscuro: "La Vicepresidenta Primera reprocha al PP su 'oposición quintacolumnista' frente a los ataques especulativos contra España".

Acusar a alguien de alta traición ("quintacolumnismo" es una concepto muy cargado de significado) es algo que no debería tomarse a la ligera. Si el fascista Bush hubiese dicho algo una centésima parte de esto respecto a los demócratas se habría abierto una crisis constitucional en los EEUU. O en cualquier país normal. Y sería criticado hasta por la mayoría de sus simpatizantes. Es sencillamente inaceptable que cargos públicos olviden que, cuando ejercen de tales (y De la Vega estaba en el Congreso hablando como vicepresidenta en la sesión de control, no era ni siquiera un acto de partido), también son cargos públicos para todos aquellos que no les han votado, y que se pasen el carácter institucional de su puesto por el forro.

Y encima, alardeando de ello en la página web que, como tal, está pagada con dinero de todos, incluidos los votantes y militantes del PP. No hay palabras.