jueves, agosto 05, 2010

UN JUEZ ha anulado la prohibición del matrimonio gay aprobada en referéndum por los californianos. ¿Es esto también una agresión, un ataque a la dignidad de California? ¿Veremos manifestaciones con la bandera del oso diciendo "We are a nation, we want to decide", en protesta porque un juez se haya cargado la voluntad popular libremente expresada por la soberanía popular? Eso es lo que muchos deberían defender, para ser coherentes con lo que pasó con el Estatut...

ACTUALIZACIÓN. Rafa Rubio, profesor de Derecho Constitucional de la Complutense, también resalta esta incoherencia. Y no podría coincidir más con su rechazo a la incoherencia intelectual: también me saca de mis casillas.