HASTA EL NEW YORK TIMES, a pesar de su lamentable editorial de hace unos días pidiendo la retirada inmediata de Iraq a pesar de que decían que provocaría un verdadero baño de sangre, empieza a ver las cosas de manera distinta. Sé que no es un editorial ni una información sino una columna, que los grandes periódicos estadounidenses suelen abrir a voces contrarias a su línea editorial (no como aquí), pero el hecho de que aparezca en estos términos es, en sí mismo, un cambio.

Y además no está escrita por dos fachorros despendolaos: tanto O'Hanlon como Kenneth Pollack son de la Brookings Institution, uno de los think tanks próximos al partido demócrata. Pollack mismo trabajó en la administración Clinton.