viernes, marzo 20, 2009

ESTOY MUY DE ACUERDO:
Si no se pierde en la peligrosa tentación del photoshop y el papel couché que últimamente parece dominarla, Soraya Sáez de Santamaría puede cuajar en figura revitalizadora de un Parlamento encorsetado y mortecino que necesita vivificarse con un pálpito de frescura.

Dice Ignacio Camacho en ABC que, de momento, ha conseguido convertirse en azote semanal de la vicepresidenta De la Vega, a la que importuna, hostiga y acorrala con el aguijón de una insolencia desenvuelta y pizpireta que empieza a inquietar a las huestes socialistas, conscientes de las grietas que la portavoz del PP abre a menudo en el otrora rocoso escudo femenino del presidente.
De acuerdo, sobre todo en el aviso contra la tentación del Photoshop. Hacía tiempo que no veía la sesión de control, y el pasado miércoles me di cuenta de que el pepé tiene un verdadero crack en Soraya. Espero no se eche a perder, aunque parece cada vez más cerca de ello.

ACTUALIZACIÓN. Muy bien Carmelo Jordá: "[M]e da la sensación de que los populares intentan mantener la euforia pero de una forma un tanto artificial, como los que con las primeras luces del día siguen intentando prolongar el cénit de una fiesta que ya está decayendo para todos los demás y se empeñan en invitarte a copas para que no te entre el bajón... que ya te ha entrado."