viernes, noviembre 13, 2009

QUÉ CASUALIDAD: vuelvo después de estar un par de días en una undisclosed location, y se les ocurre encontrar agua en la Luna...

(tengo que ponerme al día en un par de cosas, así que el ritmo de blogueo será de momento algo más suave de lo habitual hasta que lo consiga)

ACTUALIZACIÓN. El bueno de Marzo, en plena forma, me comenta por email: "Bueno, el impacto de LCROSS fue un dato espectacular, sí, pero que hay agua en la Luna ya se sabía seguro desde septiembre.  En resumen, se sabe por resultados espectroscópicos de la sonda lunar india Chandrayaan (que han levantado bastante los ánimos en la ISRO, donde estaban comprensiblemente mohínos porque calcularon mal el calor del Sol reflejado por la Luna en una órbita baja y se les frió el satélite un año antes del final previsto de la misión), que se confirmaron repasando datos de dos misiones anteriores (Cassini y Deep Impact).  Y se reconfirmo en octubre con datos de otro instrumento de Chandrayaan.

Y lo bueno es que no está escondida en las sombras perpetuas de los cráteres circumpolares: se produce agua por toda la Luna cuando protones del viento solar son atrapados y reaccionan con el oxígeno del suelo.

O sea que ahora parece que sí se cree a los soviéticos, que encontraron un 0.1% de agua en sus muestras recogidas en los años 70..."

Pues eso.