lunes, marzo 04, 2013

[Actualizado 2 veces] POR SI EL GOBIERNO no se había metido en suficiente berenjenales, va Fernández Díaz y abre esa boquita de piñón innecesariamente y la lía. Un ministro de justicia simplemente no puede decir que una figura contemplada en una ley aprobada no merece protección jurídica. Es tan sencillo como eso. Sobre todo si forma parte de un gobierno que se queja, por ejemplo, de que determinadas autonomías estén saltándose la ley porque consideran que ciertas figuras jurídicas, como los procedimientos para convocar referéndums, no sirven.

Por otra parte, creía que el argumento popular en contra del matrimonio gay no era por los derechos reconocidos —se aceptaba una ley de uniones civiles que contemplara los mismos derechos que para el matrimonio heterosexual— sino únicamente por la denominación como matrimonio.

ACTUALIZACIÓN. Con las prisas he escrito que Fernández Díaz es ministro de justicia, cuando es sabido que es de Interior; no afecta al argumento, pero lo corrijo.

ACTUALIZACIÓN II. Santi González también comenta.