A  MENOS DE DOS HORAS de que el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo dicte sentencia sobre la doctrina Parot, un post de ¿Hay Derecho? del año pasado en el que queda claro que por mucho que esta doctrina sea justa y de sentido común, y lo es, también es desgraciadamente ilegal, por lo que no tiene posibilidades de sobrevivir a la sentencia de hoy.

Ah, y para los que se alegren y digan que se hace justicia finalmente, recordad que esos beneficios penitenciarios fueron establecidos por Franco, como muestra de su paternalismo dictatorial. (claro que también se defiende un sistema laboral rígido establecido por el dictador, y eso a ningún sindicato parece que le importe, así que no tengo demasiada esperanza en que eso haga que algunos tengan dudas morales)

Y para los demás, tened en cuenta que esta sentencia tiene fácil solución, una que de hecho ya se ha hecho: cambiar el Código Penal como se hizo en 1995 y se está volviendo a hacer ahora. En los casos sentenciados tras las reformas no hay caso para que se aplique la —presumible— sentencia de hoy. Magro consuelo, lo sé.