OS AVISO de que he actualizado este post con algo que no quisiera que pasara de largo, y por esto lo resalto en una anotación independiente. Cuando lo leáis entenderéis por qué: se trata de la constancia de que varios de los principales caminos de la megaestafa del programa Petróleo por Alimentos (gracias a cuyos 'fondos' Saddam estuvo comprando a cientos de personajes en medio mundo) no llevan a Roma, sino nada menos que a Rabat. Allí es donde está el nexo geográfico que une a los más que dispuestos bolsillos de Kojo y Kobina Annan (respectivamente, hijo y hermano del secretario general de la Organización de las Ambiciones Unidas), así como de Jean-Bertrand Merimée, el ex-embajador francés ante la ONU. Los tres con intereses comerciales e incluso con residencia en Marruecos durante buena parte del año. ¿Ha sido Marruecos el hub, o por lo menos un hub, de distribución de ese dinero que estuvo pagando tantas opiniones y slogans contra las "sanciones genocidas", primero, y contra la "guerra de las cuatro íes", después? Y si es así, ¿a qué lugares pudo haber ido desde alli?
No lo sé, pero siempre habría creído que en nuestro país las salpicaduras del escándalo -que aparecerán antes o después, no tengáis la más mínima duda- iban a venir desde el norte. Ahora ya no estoy tan seguro: empiezo a pensar que quizás acaben llegando desde un punto cardinal muy distinto.
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