ESTOS HÉROES son un poco difíciles de entender: tan valientes que son enfrentándose al imperialismo asesino de Bush y sus marionetas, y para ello no se les ocurre nada mejor que llenar una escuela para niñas de bombas, convirtiéndola en una trampa mortal que sin duda habrían hecho pasar por un ataque fallido de EEUU de esos que tanto gustan a los medios occidentales.

Lástima para ellos que se les estropeara la gracia cuando alguien lo descubrió antes de que fuera demasiado tarde.