NO SÓLO no se enteran de nada en lo de la elección a gobernador de Nueva Jersey, sino que tampoco dan una respecto a la elección de nuevo alcalde de Nueva York: “De Blasio y su mensaje progresista calan en Nueva York. El candidato demócrata gana la alcadía con una contundente victoria que supone un giro a la izquierda”
En NY no ha 'calado' ningún mensaje progresista, es que está impregnada desde siempre de una mentalidad progresista; el alcalde saliente, Michael Bloomberg —además de ser un hipócrita populista que alardeaba de ir en metro al trabajo para no contaminar mientras su limusina y comitiva oficial le seguían por la superficie— tenía de republicano lo que yo de masai. Demócrata de toda la vida, dedició presentarse a la alcaldía como republicano para aprovechar el tirón dejado por Giuliani y en pleno trauma post 11-S. Posteriormente abandonaría ese partido y sería reelegido como independiente, lo que sigue siendo hasta la fecha.. Pero es que como republicano o independiente, su programa tenía entre poco y nada de conservador, favoreciendo todo tipo de incursiones del gobierno local en la vida privada. De ahí el apodo de Nanny Bloomberg (“Niñera Bloomberg”) incluso entre algunos de sus partidarios, sobre todo al pasarse de frenada con la prohibición de refrescos tamaño grande (que por suerte le 'tumbó' un tribunal). También era más anti-armas que su tocayo Michael Moore, dedicándose a montar una plataforma a nivel nacional llamada “Alcaldes contra las armas”. Es decir, nada que ver con el típico ideario republicano, por lo que lo de ayer no supone ningún giro a la izquierda porque es ni más ni menos que lo de siempre.
El giro que sí ha habido es que, como decía el otro día, la gente parece haber olvidado que De Blasio fue miembro del equipo de David Dinkins, probablemente el alcalde más nefasto que ha tenido la ciudad; casi consiguió hundirla en un pozo negro económico, de criminalidad y degradación social. Fueron posiblemente sus peores años de la historia, esos de una ciudad casi apocalíptica, la del crack, los grafitti, las putas de Times Square, los diez asesinatos diarios de media (cito de memoria) y todas esas cosas que salen en las películas de la época que nos hacía casi compadecernos de ellos en vez de considerarla como la Ciudad del Mundo a la que hay que ir sin falta, como pensamos ahora.
Si queréis ver cómo era la NY de Dinkins y De Blasio, era así. Crucemos los dedos para que no vuelvan esos tiempos.
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